¿CÓMO FUNCIONA?

La computadora interna del sistema de fotomulta en luz roja, RedLight-Safe, utiliza un algoritmo patentado que compara la velocidad de todos los vehículos que se aproximan en la zona de control con el tiempo en que se espera que la luz cambie a rojo. Si el sistema determina que un vehículo viaja demasiado rápido para detenerse a tiempo, toma una fotografía digital de alta resolución del vehículo justo antes de la barrera, mostrando la posición del vehículo, la fase roja del semáforo y la matrícula del vehículo. Si el vehículo logra detenerse antes de ingresar a la intersección, el evento se descarta. Si el vehículo pasa ilegalmente a la intersección, el sistema captura una segunda fotografía digital que muestra claramente que el vehículo pasó la barrera y e invadió la intersección. La segunda imagen puede ser tomada por la misma cámara desde atrás o por una segunda cámara ubicada al otro lado de la intersección. La última opción permite la identificación del conductor si así lo exige la ley.

CRUZAR EN LUZ ROJA MATA

Los accidentes de tráfico son la causa más importante de muerte y lesiones evitables en América del Norte. En 2007 en los EEUU, casi 900 personas murieron y se estima que 153 000 resultaron heridas en choques que involucraron el cruce en luz roja.

Los costos públicos superan los $ 14 mil millones por año, y más de la mitad de las muertes en choques por cruzar el semáforo en rojo son de otros automovilistas y peatones. No hay duda de que los que cruzan un semáforo en rojo son conductores peligrosos, que de manera irresponsable ponen en peligro a los demás. En las ciudades de Estados Unidos, donde con demasiada frecuencia la luz amarilla se ha convertido en el símbolo de "apresurarse" en lugar de "reducir la velocidad", cruzar con luz roja es la causa principal de todos los accidentes automovilísticos urbanos.

El público estadounidense reconoce el problema, está profundamente preocupado por el cruce de los semáforos en rojo y apoya el uso  de fotomulta y cámaras en los semáforo. Una encuesta nacional de 2002 patrocinada por la Administración Nacional de Seguridad Vial en las Carreteras y realizada por la Organización Gallup encontró que el 75% de los conductores estaban a favor del uso de cámaras semafóricas. La mayoría de los estadounidenses (96%) tienen miedo de ser atropellados por un cruce en luz roja, pero casi uno de cada cinco admite haber cruzado un semáforo en rojo en las últimas diez intersecciones. La principal excusa que se dio para esto no fue ni la frustración ni la ira en la carretera; sino solo"tener prisa". Campaña Nacional para Detener el Cruce con Semáforo en Rojo.